Un 'tapón' de cemento que hacía las veces de puente en un ramblizo que atraviesa una explotación ganadera de La Palma estuvo a punto de causar una desgracia en la diputación cartagenera. El desbordamiento de las aguas a causa del bloqueo del cauce hizo que se inundaran numerosas viviendas de urbanizaciones próximas. La alcaldesa de Cartagena, Pilar Barreiro, para evitar males mayores, ordenó que una excavadora municipal entrase en la propiedad y dejase el cauce libre.
Fue la propia alcaldesa la que explicó ayer, mientras hacía balance de la jornada de lluvias torrenciales del lunes, que La Palma fue uno de los lugares más afectados por las avenidas de agua debido al desbordamiento de un ramblizo que atraviesa una finca, situada a las afueras del pueblo. El propietario de las finca, una explotación ganadera, para evitar tener que rodear el cauce, cegó el ramblizo -que en algunos puntos tiene una profundidad de dos metros- con cemento para crear un vado y así poder atravesarlo. Ante esta situación y cuando las aguas desbordadas ya habían entrado en los sótanos de varias viviendas próximas, se habló con el propietario de la explotación para que dejase entrar a una excavadora municipal con el objetivo de eliminar el bloqueo del ramblizo.
Tras liberar parcialmente el cauce, el propietario de la finca preguntó quién se haría cargo de los daños y decidió que ya era suficiente, por lo que pidió al conductor de la excavadora que se marchara. En aquel momento y ante lo tenso de la situación, el propio concejal de Urbanismo del ayuntamiento de Cartagena, Joaquín Segado, se subió a la máquina para que continuase rompiendo el cemento que obstruía el canal, aunque finalmente la máquina se retiró de la propiedad.
Mientras, la alcaldesa Barreiro se ponía en contacto con la consejería de Agricultura y Agua para poner en su conocimiento la situación que se estaba produciendo. Además, se denunciaron los hechos ante la Confederación Hidrográfica del Segura (CHS) para que tome medidas al respecto.
Fuente: La Opinión de Murcia.